Con la idea de resolver las preguntas más frecuentes que recibimos de personas interesadas en comprar una moto eléctrica, se ha desarrollado el siguiente artículo para que los interesados en adquirir o financiar una moto eléctrica o de combustión puedan resolver sus principales inquietudes y de este modo, tomar la mejor decisión.
A continuación las 10 preguntas más importantes:
Lo primero a saber es que la autonomía de una moto eléctrica se mide en kilómetros, por esta razón, debemos conocer la distancia que se va a recorrer en un día. Como referencia desde el extremo sur de Bogotá (Bosa) hasta su extremo norte (calle 220) hay una distancia de 32 km. Ahora, si la distancia que existe de la casa al trabajo es de 20 km, se necesitaría una moto que tenga una autonomía de 40km para poder ir y regresar, a menos que sea posible cargar la moto en el lugar de trabajo. Por ende, la mayoría de motos eléctricas que se encuentran en el mercado le permitirán al usuario recorrer Bogotá de extremo a extremo con una carga, e incluso si se vive a las afueras de la ciudad sería una opción viable.
Para más información puedes leer: Cómo se Mide la Autonomía de una Moto Eléctrica.
La forma más simple de responder esta pregunta es haciendo una comparación con los celulares y/o portátiles. Las motos eléctricas vienen con un cargador que es similar al de un portátil, el cual se conecta a una toma eléctrica de 110V y su otro extremo va conectado a la moto eléctrica o a su batería. Si no se tiene una toma eléctrica en el lugar de parqueo, se debe buscar un modelo que cuente con batería extraíble, lo cual permitirá retirar las baterías y acercarlas a una toma eléctrica convencional.
Para más información puedes leer: Cómo se Carga una Moto Eléctrica.
Son dos preguntas muy frecuentes, y su respuesta depende de la potencia del motor y de las pendientes que se deban superar en el recorrido. Los motores más comerciales van desde 800W hasta 5000W, este valor nos da una referencia de la potencia que puede entregar el motor eléctrico. La buena noticia es que incluso los motores de 800W pueden superar pendientes como las de un puente vehicular, o cumplir trayectos como el de Bogotá a La Calera sin problema. Si en el trayecto existen pendientes muy elevadas (más de 15° de inclinación) es recomendable motores de 1500W o superiores. Igualmente, nada mejor que solicitar la prueba de ruta de la moto que quieres comprar, o preguntar a un usuario de moto eléctrica cuál es su experiencia en pendientes similares a las de tu recorrido.
En cuanto a la velocidad, encontramos que la mayoría de las motos eléctricas superan los 45 km/h y en algunos casos llegan a más de 100 km/h. Normalmente las motos eléctricas tienen diferentes niveles de manejo, los cuales limitan la velocidad para mejorar el consumo de energía, y así ofrecer diferentes rangos en su autonomía. Para quienes quieren desplazarse dentro de la ciudad, una velocidad de 45 km/h puede ser suficiente, teniendo en cuenta que los límites de velocidad urbanos son estrictos y la velocidad promedio en horas pico puede ser inferior a 20 km/h.
Esta puede ser una de las ventajas más grandes de una moto eléctrica en comparación con una de combustión. El costo por km recorrido está entre $5 y $10 dependiendo de la potencia del motor. Por ejemplo: recorrer a Bogotá de extremo a extremo (32 km), tendría un costo aproximado de $250 de energía. Una moto eléctrica no requiere cambio de aceite, y las piezas de desgaste se limitan a frenos, llantas, rodamientos y batería. En la siguiente tabla se puede ver la comparación de los costos aproximados de una moto eléctrica y una moto de gasolina suponiendo un recorrido al mes de 1.000 km:
| CONCEPTO | Moto Eléctrica 1500W | Moto Combustión 125CC |
| SOAT (2020) | $14.417 | $40.248 |
| ENERGÍA / GASOLINA | $7.000 | $32.000 |
| ACEITE | $0 | $20.000 |
| BATERÍA | $37.500 | $8.000 |
| KIT ARRASTRE | $0 | $12.500 |
| MANTENIMIENTO GRAL | $25.000 | $45.000 |
| TOTAL MES | $83.917 | $158.081 |
| TOTAL ANUAL | $1.007.000 | $1.896.976 |
Con este ejercicio se puede ver que el ahorro aproximado que una moto eléctrica ofrece en un año es de $890.000, convirtiéndose así en uno de los medios de transporte urbanos más económicos actualmente.
La duración de las baterías es quizás el temor más grande dentro de los usuarios de motos eléctricas, puesto que representan una inversión importante en su cambio. Y son el elemento que da vitalidad y autonomía a un vehículo eléctrico. Para iniciar se debe saber que existen dos tipos de batería en el mercado: plomo y litio, estos componentes cuentan con diferencias en su vida útil, tiempo de carga, peso y precio.
Las baterías de litio son más livianas, pueden ser extraídas, el tiempo de carga promedio es de 6 horas y su vida útil es de 3 a 5 años. Las baterías de plomo tienen una vida aproximada de 2 años. Además, el tiempo de carga promedio es de 8 horas y ya se encuentran en versiones extraíbles en algunos modelos de motos. En cuanto a su precio: una batería de litio de 48V20Ah tiene un valor de $1.500.000, mientras que el valor de una batería de plomo con las mismas características es de $720.000, es decir, que el valor de una batería de litio suele ser el doble de su equivalente en plomo. Así mismo, su vida útil suele ser el doble de tiempo.
Existe una fórmula práctica para conocer el valor de las baterías de una moto eléctrica, en el caso de ser de plomo el valor suele ser un 30% del valor del vehículo, y en el caso del litio su valor suele ser un 40%. Esta fórmula no es exacta pero ofrece un valor aproximado.
La respuesta es: depende. Y depende principalmente del presupuesto, porque la recomendación sería optar por batería de litio debido a que: son más livianas, tienen mayor vida útil, y el tiempo de carga es menor. Las baterías de litio suelen ser necesarias si en el lugar de parqueo no hay tomas eléctricas y su extracción es indispensable para realizar su carga. La buena noticia es que actualmente se encuentran motos eléctricas con baterías de plomo extraíbles, que entregan lo mejor de los dos mundos: bajos costos en las baterías y la comodidad de extraerlas y cargarlas en la casa u oficina.
En resumen, las baterías de litio son más costosas, pero a su vez su vida útil compensa el sobre costo, su peso facilita que tenga la posibilidad de extraerse y el tiempo de carga es menor. Por lo tanto, optar por un tipo u otro termina siendo una decisión del presupuesto que se tenga o de la posibilidad de cargar la moto en el lugar de parqueo.
El Ministerio de Transporte publicó en el 2016 la Resolución 160, creando la categoría de Ciclomotores y bicicletas eléctricas, así como los requisitos para que estos vehículos circulen en las vías públicas. Para resumir, las bicicletas eléctricas son vehículos de dos ruedas con motor eléctrico y no deben superar las siguientes características: potencia 350W, peso 35 kg y velocidad 25 km/h. Cualquier vehículo de dos ruedas con motor eléctrico que supere alguna de estas características se considera un ciclomotor. Por otro parte, las bicicletas tienen el mismo trato que una bicicleta tradicional, mientras que los ciclomotores deben contar con matricula y SOAT, y su conductor debe tener licencia de conducción tipo A1 o A2 (la misma categoría para motos a combustión).
La Resolución 160 fue suspendida en el 2018 por el Consejo de Estado, lo cual generó un espacio donde existió un vacío jurídico; sin embargo, fue ratificada el 9 de julio de 2020 por el mismo Consejo de Estado lo cual implica que todas las motos eléctricas vendidas a partir de dicha fecha deben contar con matricula y SOAT de manera obligatoria.
La gran ventaja de las motos eléctricas o ciclomotores, son las tarifas para su matrícula y SOAT: mientras que la matrícula para una moto de gasolina puede costar $700.000, la de una moto eléctrica es de $380.000, y el SOAT anual es de $173.000 actualmente versus $409.000 para el caso de una moto de 125CC.
Quizás es la pregunta más importante a resolver, y no es algo exclusivo de las motos eléctricas sino de cualquier vehículo que se piense adquirir. La garantía ofrece la tranquilidad de que cualquier falla del vehículo va a ser cubierta y reparada. El periodo mínimo de garantía que se debe exigir es de 1 año, y debe cubrir todos los componentes especialmente la batería que es el elemento más crítico de una moto eléctrica.
Una vez finalizado el periodo de garantía, se debe confirmar el acceso a repuestos y centros de servicio donde se pueda realizar el mantenimiento y reparaciones respectivas. Esto es vital para que el vehículo mantenga las condiciones óptimas, y así mismo prolongar su vida útil. Muchas veces se compra con el impulso que nace de tener un vehículo nuevo, pero no se tiene en cuenta que la relación con la marca va más allá del momento de la compra. Y que dicha relación estará ligada al tiempo que se use el vehículo como medio de transporte, y en especial en el momento de venderla asegurando al nuevo propietario el respaldo de la marca que está comprando.
Es muy importante validar el respaldo de la marca de la moto eléctrica, confirmando su trayectoria y capacidad financiera para soportar cambios en el mercado, su red de servicio posventa, así como la disponibilidad de repuestos que ofrece, de tal forma que se garantice el respaldo no solo en el periodo de garantía sino en los años siguientes.
Para responder esta pregunta se va a utilizar un ejemplo: en el año 2017 se realizó una vuelta a Colombia con la moto eléctrica Soco TS 1200 bajo una iniciativa llamada eTour. El recorrido total dio como resultado: 6.600 km. Por lo que esto fue lo que demostró que una moto eléctrica puede superar condiciones exigentes tanto en condiciones de terreno como climáticas. Para cumplir con el recorrido se cargaban las baterías cada 100 km, de tal forma que el recurso primordial era el tiempo debido a que cada carga requería de 6 horas de espera. La ventaja es que cualquier toma eléctrica convencional se convierte en una estación de carga para una moto eléctrica, lo cual se demostró en el eTour 2017, donde se realizaron cargas en: restaurante, hostales, estaciones de servicio o en cualquier lugar que facilitó la conexión a la red eléctrica.
El eTour fue una demostración más académica que funcional, la recomendación es calcular la distancia entre las dos ciudades, validar si existe la posibilidad de cargar la moto en el destino y si se cuenta con el tiempo para completar la carga. Con estos cálculos se podrá saber si la moto eléctrica cumplirá con dicho trayecto.
Para más información del eTour https://www.youtube.com/watch?v=V51eZB-lm2M
Esto sería como comparar peras con manzanas. Esto se debe a que, los centímetros cúbicos hablan del tamaño de un motor de combustión, mientras que los vatios definen el consumo de un motor eléctrico. Los dos conceptos intentan comunicar qué tan potente y rápido puede ser un motor. Pero la verdad es que un motor de combustión se comporta diferente a un motor eléctrico.
Mientras que un motor de combustión tiene su mejor desempeño en altas revoluciones, el motor eléctrico lo hace en bajas revoluciones. Para dar un ejemplo: si una moto eléctrica de 1500W se encuentra en un semáforo en rojo con una moto de 200cc, seguramente la eléctrica le va a tomar ventaja en la arrancada; sin embargo, la moto de combustión en altas revoluciones entregará más potencia y así mismo velocidad final. Esto haría que en distancias cortas la moto eléctrica supere a una moto de combustión, y en distancias largas sea la de combustión la que lleve la ventaja.
En conclusión, una moto eléctrica es ideal para viajes dentro de la ciudad. Además, vemos que cada día las motos eléctricas se posicionan como una de las mejores alternativas de transporte por: bajos costos de operación. Tarifas preferenciales de SOAT, no pagar impuestos nacionales, estar exentas de pico y placa, su fácil manejo, y principalmente porque se cuida el aire que respiramos.
Así mismo, como nos lo confirmó Julián Martínez de Be Electric. Hoy en día las motos eléctricas son un medio de transporte unipersonal y seguro. Por lo que se ha convertido en una de las soluciones preferidas por familias o personas que buscan resolver los viajes habituales dentro de la ciudad.
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